viernes, 15 de mayo de 2020

DESDE EL CORAZÓN













No sé cómo empezar este hilo, porque va a ser muy íntimo y necesito desvincularme un poco para poder centrarme en lo importante y no tanto en los sentimientos que me causan.

Bien.

Estos dias, y gracias a que se dispone de más tiempo, estoy estrechando vínculos con la familia.
Familia que son, digamos, de segunda generación.
No sé decirlo de otra forma.
O sea...primos, tios...

Bueno, tios ninguno; sólo primos. Esos primos que solo veo cuando alguien se muere. Ni siquiera en las bodas...

Y gracias al Whasapp (hay que venerarlo como a un dios, aunque sea un dios menor...), digo que gracias a esa aplicación estamos compartiendo fotos y videos de épocas pasadas.

Y realmente es genial. Es increible ver lo que estábamos haciendo en aquellos dias, o cómo éramos fisicamente. No tan diferentes quizas...porque aun conservamos ciertos rasgos que nos hacen únicos.

Hemos compartido fotos de los hijos de los nietos...y de cada uno de nosotros.
Es increible, verme otra vez vestida de primera comunión...ver a mi prima ya muerta hace mas de 10 años...pobrecita. La quiero muchisimo y no pude explicarselo nunca, porque tampoco sabía yo que la quería tanto...

Y me ha dado por buscar...de alguna manera esa esencia que continua por años y que nos define a todos de una manera distinta a cada uno.
¿qué me define a mi?. No sé...quizas tenemos una opinion de lo que éramos que no se corresponde con la verdad de aquella época. No sé.
Pero me asalta la pregunta de siempre: ¿qué cambiariamos de nosotros mismos, si pudieramos hacerlo, para que el resultado hubiera sido el que ahora deseamos ser?.

No sé si se me entiende.

¿cambiaríamos algo de aquella época?...pero de nosotros mismos. Algo para que el resultado sea que seamos mejores ahora mismo.
O distintos si es que hay algo que no nos gusta de nosotros.

Yo quisiera cambiar algo. Lo he contestado muchas veces a quien me ha hecho la pregunta.

Me hubiera gustado ser más valiente; para sentirme capaz de hacer aquello que me gusta ahora y que seguramente me gustaba antes, de pequeña, pero que sólo veo en esas fotos...

¿cómo fué que no fui valiente?.

Mirando las fotos me he dado cuenta. Era una época donde la mujer no tenía ningun derecho, estaba sujeta al marido o a un personaje masculino. Lo veo en el rostro de mi abuela, en la de mis tias, en la de mi madre.
Se palpa. Auqnue parece dificil hacerlo en unas pocas fotos. Pero así es.

La presencia del abuelo, patriarca, inmensa y alrededor todo lo demás. Y sobre todo, la especial predileccion por los varones: el hijo, los nietos...
Y aparte, y muy lejos...las mujeres: la esposa, las hijas...las nietas...

Irrelevantes todas. ¿Puedo verlo en las fotos?..La respuesta es Sí. Un rotundo sí..¡¡¡

No éramos nada. Y lo peor es que esa cultura patriarcal prosperó en las hijas que lo trasmitieron a sus propias hijas...y así....hasta que de alguna manera hemos sido conscientes de esa injusticia.

Y ahí, creo, viene mi cobardía. En un mundo lleno de hombres, una niña...¿qué podía hacer?..
¿qué podía hacer cuando ni siquiera un abrazo, un beso o una palabra de ánimo salía de la boca del abuelo, del padre o de los primos...?

Saberlo me da cierto consuelo. Y ganas de cambiarlo. Y no creo que sea demasiado tarde para ello.

Nunca es demasiado tarde.

Lo he escrito desde el corazón...












2 comentarios:

  1. Es una entrada muy intima,intentare estar a tu altura.
    En mi caso, lo de la familia, hace un par de años que los primos decidimos mantener un contacto mayor, el desencadenante fue la muerte de dos primos, uno de cáncer y otro en circunstancias difíciles. En consecuencia organice, aprovechando que en el pueblo de nuestras madres, hicieron un encuentro de los nacidos e hijos; fuimos 23, cuatro generaciones, nunca habíamos sido tantos en los escaso encuentros. Intercambios de fotos, whastsapp. Y el deseo de vernos. La nostalgia de nuestra juventud también se notó. Creo que nos hemos hecho viejos y tenemos necesidad de reforzar nuestra identidad de pertenencia al clan o la tribu.
    En cuanto al patriarcado, deduzco que te ha macado mucho, lo que escribes es tu vivencia. Las circunstancias sociales eran machistas y lo sufrió la sociedad, hombres incluidos cuando su padre decidía por ellos.
    Sé que te sonara extraño, en mi caso fue al contrario al tuyo, sufrí más el matriarcado con mujeres de fuerte carácter que hay en mi familia, tomando el control de todo.

    YOEL


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  2. Hola Yoel, gracias por comentar.

    Lo curioso, en mi caso (no sé si a otras mujeres les habrá pasado lo mismo), sólo he sido consciente de ese trato diferencial a través de las fotos y de los recuerdos que me han evocado.

    En todo caso no existe ningun culpable; todos somos hijos de la época que nos ha tocado vivir. Y las mujeres de mi familia no son una excepción, ellas veían normal que se apreciara más el hecho de ser varon que hembra.
    Si hubo alguna falta, esa fue la mía que no supe rebelarme, que di por hecho que tenía que ser así.

    Sólo a través de los años nos damos cuenta.

    Y queda no perpetuar el error en nuestros hijos e hijas.
    Habrá otros errores, por supuesto, porque ese es nuestro trabajo aquí: aprender.
    Y se aprende de los errores.

    Saludos ¡¡

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